“Todo lo que se propone hacer para mitigar el cambio climático es lo que siempre hemos debido hacer con relación a los bosques amazónicos, y lo primero es no deforestar”, dijo el reconocido ambientalista, Marc Dourojeanni, en el Seminario Amazonía Sur Peruana.

Para escenificar la problemática regional explicó que, en la región amazónica, “todo lo que se haga de manera sostenible ambientalmente puede mejorar la vida de los peruanos, bolivianos, brasileños y ayudar al mundo”.

Si en las últimas décadas hemos deforestado entre 10 a 14 millones de hectáreas, ¿por qué solo hay 2 millones de hectáreas para la producción y hay 8 o más millones de hectáreas que no producen, y están con vegetación secundaria? se pregunta el destacado ambientalista.

En referencia a lo anterior continúa su razonamiento, interrogándose por qué no se les otorga esas tierras a quienes estén dispuestos a intervenir y hacerlas producir, y se les otorga la cesión.

Explica que el problema es que se encuentran calificadas como suelos con “aptitud forestal”, y por ello, de acuerdo a ley, estas no pueden ser entregadas porque pertenecen al estado, pero este no tiene la capacidad para evitar la deforestación ni administrarlas, por lo que el primer paso es regularizarlas para que puedan ser utilizadas, sintetiza Dourojeanni su planteamiento.

El segundo punto es que, en toda la región, en Brasil, Perú y Bolivia, la productividad de las tierras por hectárea es 20 o 60% menos de su potencialidad. Eso quiere decir, que se puede invertir en aumentar la productividad en las tierras ya deforestadas. Depende de los ministerios de Agricultura, que deben dedicarse a dar un mayor apoyo a los agricultores migrantes, a los indígenas y a todos los productores agrarios, explicó el especialista.

Dourojeanni opinó que otro tema pendiente es detener la construcción de las carreteras en la zona amazónica. El 70% de las carreteras actuales no tienen estudios de impacto ambiental, y están fuera de la ley. Propuso una moratoria de algunos años en bosques naturales.

“La deforestación la hacen migrantes que bajan porque no tienen las condiciones adecuadas, en sus lugares de origen. Hay que considerar que hay más de un millón de hectáreas de andenes sin utilizar, y sin mencionar la agricultura que se hace en China, en Asia, en Nepal, hay mucho potencial sin usar”, asevera el exasesor senior del Banco Mundial.  

En resumen: se debe usar las tierras deforestadas, aumentar la productividad de las tierras, no abrir carreteras en la zona amazónica, mantener la población en sus lugares de origen, con adecuadas políticas de desarrollo local; todo ello puede ayudar a mitigar el impacto del cambio climático, concluyó Dourojeanni.